Fernando Martín Suazo Galindo huyó de la milicia en Honduras y se estableció en Salamanca, donde tiene años viviendo en un camellón

Salamanca.- Fernando Martín Suazo Galindo, migrante originario de Honduras, está por cumplir siete años viviendo en la vía pública en esta ciudad. Se resiste a dejar el camellón donde ha construido su “vivienda” en el acceso al fraccionamiento El Monte, y lo único que pide son lonas para cubrir el lugar donde duerme y sus pertenencias.

Para los habitantes de la zona se ha hecho costumbre ver la improvisada choza en medio del camellón. Debajo de un árbol el migrante acomodó como pudo cobijas y algunos plásticos que lo resguardan de las inclemencias del tiempo. Dentro tiene un colchón que por las lluvias está mojado y ahí duerme, mientras que en el exterior tiene ropa que espera se seque encima de un montón de leña.

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A pesar de que ha tenido conflictos con algunos vecinos que incluso habían solicitado su retiro hace más de dos años al señalarlo como agresivo, autoridades municipales de ese entonces y otro grupo de vecinos lo respaldaron quedándose en el sitio, donde se mantiene con las monedas que le brindan los automovilistas o alimentos que le llevan las familias.

El migrante hondureño en Salamanca, con frases entrecortadas, recuerda sus vivencias en su país natal, donde participó en la milicia. Debido a esto, a los 35 años salió de Honduras con la finalidad de llegar a los Estados Unidos, pero el destino lo dejó en Salamanca. Aquí permaneció en la zona centro por unos meses y posteriormente se estableció en su ubicación actual.

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Durante su estancia ha padecido grandes dificultades. Estos van desde problemas de salud que han requerido una intervención quirúrgica y que pudo atender con apoyo de una vecina y el sector salud; hasta agresiones con un machete para amedrentarlo para que se retire.

“Ahí están los machetazos en el árbol, vinieron y me amenazaron, pero aquí estoy, esta es mi casa y tengo permiso para estar aquí”, afirma.

El migrante hondureño en Salamanca reiteró la solicitud de apoyo al Gobierno municipal y a los ciudadanos con lonas para resguardarse dentro de su “vivienda” durante la temporada de lluvias, así como alimentos u otros artículos que le ayuden a pasar el día a día.